jueves, 13 de septiembre de 2012

El sentido del humor y la muerte

 

"El sentido del humor da ternura a la muerte" entrevista a Fidel Delgado por Gema Salgado
Desde hace treinta años, el psicólogo Fidel Delgado acompaña a personas con enfermedades terminales y enseña a profesionales de la salud y cuidadores cómo pueden ayudar a "morir bien". Asegura que mantener en forma la lucidez, cultivando el sentido del humor y soltando lo que ya no nos sirve, nos permitirá vivir con sentido y encarar la muerte con conciencia y sin dramatismos.

¿Por qué nos aterra tanto la idea de la muerte?
No todas las personas tenemos miedo. En nuestro interior, hay una esencia que nos pide cambiar y que considera imprescindible soltar las formas de vida que caducan. Pero, en una forma más superficial de la existencia -donde nos identificamos con una manera de pensar, de relacionarnos, de vivir los cambios...-, nos aterra que algo se termine.
El miedo a morir es más una cuestión de ego que de yo profundo, porque una visión más amplia del vivir evidencia que la existencia es un fluir constante y que ninguna forma es estable. Sería una desgracia que me quedara en el día más feliz de mi vida. Vivir es precisamente renovación.

¿Cómo podemos superar este miedo primigenio, raiz de todos los miedos que vivimos?
Los miedos, más que superarlos, hay que comprenderlos. En vez de pelearnos con ellos, hay que reconocerles su función como protectores biológicos para que no nos envenenemos, no nos quememos, no nos caigamos...
Y, luego, debemos comprender que, cuando se extienden a otras áreas de la vida y la limitan, se convierten entonces en un obstáculo y dejan de tener eficacia. En cuanto al miedo a la muerte, lo podemos dejar atrás si ensanchamos la compresión sobre la vida: la vida no se termina; se terminan formas de vida. Pero el vivir en mí, el vivir que soy, no se termina.

Aunque nuestra conciencia sea inmortal, nos sigue entristeciendo saber que moriremos...
Si hemos soltado bien, seguramente ni tú ni yo recuerda anteayer con pena. Probablemente quedó en su sitio lo que comimos, lo que hablamos, lo que nos reímos... Anteayer caducó gloriosamente.
Creo que esta es la esencia del asunto, que el vivir sea pleno y que cada día, que tiene su afán, se redondee y se deje atrás, se suelte.

¿Cuál es la mejor manera de despedir a un ser querido que está a punto de morir?
La clave está en no añadir más dificultad a un tránsito que es complejo y acompañar de la mejor manera posible, con nuestra comprensión y lucidez. Debemos comprender que no hay un modo ideal de morir, no se puede exigir a alguien que se muera según el manual de la muerte consciente. Se trata de acompañar a la persona en su tránsito y nada más.

Usted utiliza el sentido del humor para la curación del alma. ¿Nos iría mejor en todos los ámbitos si nos tomáramos la vida con menos rigor?
El humor es un derivado de la ternura y de la comprensión. Nos quita, en primer lugar, importancia a nosotros mismos y, luego, a nuestras formas de organizar las cosas. Aunque hay un refrán que dice "No vayas cantando donde están llorando", el humor da ternura a la muerte y nos ayuda a no endurecer todavía más la situación con nuestro propio miedo.

¿Qué nos aconseja para vivir felices y despegados y tener una muerte en consonancia?
Yo no he buscado nunca la felicidad; viene de la mano y fluye sola de la lucidez. La conciencia o lucidez va diluyendo los miedos y la ignoracia, que conforman el sufrimiento. Entonces, nos encontramos simplemente con que la vida hace más luminosa, fluida, y tal vez eso es sinónimo de felicidad.

Fidel Delgado
Psicólogo clínico. Formador en el arte de la transformación consciente y férreo defensor del sentido del humor, que como asegura, es salud.
Es autor de "Saber cuidarse para poder cuidar" (PPC Ed.)

1 comentario: